Iglesia Cristiana del Movimiento Misionero Mundial en Tacoma

Iglesia Cristiana Pentecostes del
Movimiento Misionero Mundial

DECLARACIƓN DE FE

 

MMM TACOMA

La Iglesia Cristiana Pentecostes M.M.M cree y practica las doctrinas fundamentales de las sagradas escrituras. Su doctrina es fundamentalista Cristocentrica y Bibliocentrica respectivamente.

No mezclada con tradiciones y enseƱanzas humanas, sino fundamentada en las enseƱanzas mƔs puras de La Biblia, la autoridad mƔs confiable que fue tomada de los manuscritos originales; Sagradas Escrituras que constan de 66 libros los cuales creemos son inspirados por el Espƭritu Santo (2 Timoteo 3:15-17); (2 Pedro1: 20,21), Escrituras que no interpretamos libremente, sino que la Biblia misma es su propia intƩrprete.

Asi que creemos en

 
  • Un solo Dios en tres personas: Padre, Hijo y 3:16; 17; 28:19; GĆ©nesis 1:26; IsaĆ­as 43:7; Juan 14:23; 1 Juan 5:7; 2 Pedro 1:17,18; EspĆ­ritu Santo, eterno, invisible pero real, el cual creĆ³ todo de la nada por que tenĆ­a un plan La SalvaciĆ³n del hombre Ćŗnicamente por la fe en Jesucristo, ya que el hombre pecĆ³, fue separado de Dios y no se puede salvar por sĆ­ mismo. (Hechos 4:12; Romanos10:13,15; Tito 3:5-7.
  • En el Nuevo Nacimiento, (Juan 3:3-6; 1 Pedro 1:23; 2 Corintios 5:17)
    La JustificaciĆ³n por la fe Ćŗnicamente en Jesucristo, quien vino al mundo siendo concebido sobrenaturalmente por obra delEspĆ­ritu Santo en MarĆ­a Virgen, siendo completo hombre y completo Dios, viviĆ³ sin pecado, muriĆ³ en una cruz, resucitĆ³ al tercer dĆ­a, subiĆ³ al Padre y vive para siempre. (Lucas 24:45-47; Romanos 5:1; Tito 3:7).
  • El Bautismo en agua por inmersiĆ³n, segĆŗn lo ordenado por Cristo, como parte de las dos Ćŗnicas ordenanzas o (sacramentos) que el mismo estableciĆ³ ā€œEl Bautismo y La Santa Cenaā€, Bautismo realizado sĆ³lo despuĆ©s de creer y arrepentirse. (Mateo 28:19; Marcos 16:16; Hechos 16:31-33).
  • En el Bautismo en el EspĆ­ritu Santo que viene despuĆ©s que la persona recibe la salvaciĆ³n, y que se manifiesta hablando el creyente en otras lenguas como seƱal, (Hechos 1:5; 2:4; Lucas 24:49; Hechos 11:15,16).
  • Los dones del EspĆ­ritu Santo, que son la investidura de poder sobrenatural que el EspĆ­ritu Santo Regala a los creyentes fieles.
  • Los Frutos del EspĆ­ritu Santo (GĆ”latas 5:22-26).
  • En la SantificaciĆ³n del creyente, la inmediata y la progresiva, ya que sin ella nadie vera al SeƱor (Hebreos 12:14; 1 Pedro 1:15,16; 1 Tesalonicenses 4:3; 5:24; 1 Juan 2:6).
  • Creemos en la Sanidad Divina y los milagros (IsaĆ­as 53:4; Mateo 8:16,17; Marcos 16:18; Santiago 5:14,15).
  • Los ministerios y la evangelizaciĆ³n del mundo. (Marcos 16:15-20; Efesios 4:13).
  • Creemos en el Diezmo y la ofrenda, revelados desde antes de la ley y hasta el nuevo testamento como principio fundamental en la poderosa ley de la siembra y la cosecha, para llevar adelante la obra de Dios y para la bendiciĆ³n plena de los verdaderos y fieles creyentes. (GĆ©nesis 14:20; 28:22, MalaquĆ­as 3:10; Mateo 23:23) (JesĆŗs dice que no hay que dejar de hacerlo).
  • Creemos que pronto los cristianos (La Iglesia) serĆ”n llevados al cielo en el ā€œarrebatamiento de la Iglesia por Jesucristo, siendo los verdaderos creyentes fieles arrebatados en un instante de la tierra, junto con los muertos en Cristo quienes resucitarĆ”n primero. (I Tes.4: 14-17; I Corintios 15:51,52).
  • Creemos que Cristo volverĆ” siete aƱos despuĆ©s de este hecho asombroso a la tierra por segunda vez, personal y visiblemente para reinar por mil aƱos. (II Tesalonicenses 1:7; ZacarĆ­as 14:4; Mateo 24:30; Apocalipsis 20:4,6).
  • Siguiente a esto habrĆ” un juicio final para todos los que no fueron salvos. (Apocalipsis 20:11-15).
  • VendrĆ” entonces un nuevo cielo y una nueva tierra, en la cual estarĆ” la nueva JerusalĆ©n o ciudad celestial y Dios estarĆ” eternamente con su pueblo.(Mateo 24:35; II Pedro 3:10,13; Hebreos 1:10,11; Apocalipsis 21:1-3).
  • Creemos que al morir un verdadero creyente, pasa inmediatamente a la presencia de Cristo, para permanecer allĆ­ hasta la resurrecciĆ³n de su cuerpo que serĆ” manifiesta con la venida de Cristo el dĆ­a del rapto, (1 Corintios 15:23,52,54. Filipenses 1:21-23).